El proyecto
Acerca del proyecto: La discriminación de género y las desigualdades de género fueron los dos problemas globales que persistieron durante mucho tiempo. Las estrategias de antidiscriminación y de igualdad de género se implementaron interna y externamente por naciones y organizaciones internacionales. La Estrategia de Igualdad de Género para 2020-2025, por ejemplo, fue creada por la Comisión Europea y delineó problemas relacionados con el género, así como soluciones y acciones para abordarlos. La igualdad de género fue elegida por las Naciones Unidas como uno de sus Objetivos de Desarrollo Sostenible, destacando su significado significativo para el futuro de nuestro planeta y nuestras sociedades. La igualdad de género es un derecho humano fundamental. La discriminación basada en el género lo viola. El prejuicio infantil hacia un género conduce a la discriminación de género. Las personas, ya sean niñas o niños, estuvieron sujetas a un trato desigual y a normas de género con respecto a las expectativas, el acceso a recursos y oportunidades desde el momento en que nacen. Esto tuvo efectos duraderos en sus hogares, escuelas, comunidades y lugares de trabajo. Las madres animaban a sus hijas a ayudar con las tareas domésticas; Se instaba a los niños a prepararse para trabajos más difíciles. Niñas y niños tenían diferentes oportunidades educativas como resultado de estas normas. La desigualdad de género persistió a pesar del progreso global. Demasiadas niñas, especialmente las de las familias más pobres, continuaron siendo objeto de discriminación de género en el empleo y la educación. Además, dependiendo del país, podrían haber enfrentado matrimonio infantil y embarazo, violencia sexual y trabajo doméstico. La igualdad de orientación no fue solo un gran derecho fundamental, sino también un punto de partida importante para un futuro pacífico, próspero y sostenible. Eliminar los problemas de orientación significó una vida donde mujeres y hombres, niñas, niños y personas de grupos marginados disfrutaron de iguales derechos, tratamiento, recursos, oportunidades y seguridad. Como un grupo de jóvenes que experimentaron discriminación de género, quisimos llevar a cabo este proyecto para abrir un espacio de diálogo. Los jóvenes necesitaban abogar por temas relacionados con el género y resistir la presión social a la que estuvieron sujetos desde una edad temprana. Quisimos compartir y desarrollar nuevas herramientas para combatir formas contemporáneas de discriminación e desigualdad, como el sexismo en línea, el racismo, el acoso laboral, y así sucesivamente, como ciudadanos globales activos. Quisimos desafiar a los jóvenes y encontrar formas de poner fin a la discriminación en línea y en el mundo real. Creíamos que se había demostrado que dar poder a niñas y niños desde una edad temprana tenía beneficios que perduraban y se acumulaban con el tiempo. Las sociedades que luchaban contra la desigualdad de género tendían a ser más estables, seguras y prósperas, con ciudadanos más felices y educados, según la historia. Este diálogo fue más importante que solo a nivel nacional. La creación de un espacio multicultural debería haber ayudado a los participantes a comprender el funcionamiento de otras sociedades y a compartir las mejores prácticas. El proyecto tuvo más oportunidades educativas debido al entorno intercultural del intercambio. El hecho de que fuéramos personas que habían experimentado desigualdad de género fue la justificación principal y el requisito para el proyecto. Descubrimos que los jóvenes debían ser conscientes de los esfuerzos realizados por los estados, organizaciones internacionales y organizaciones no gubernamentales locales (ONG) para incorporar la igualdad de género y abordar las desigualdades de género. Debían ser conscientes de sus derechos y de los recursos disponibles para ellos. Por último, los jóvenes debían ser conscientes de que existían numerosos recursos disponibles. Además, el proyecto tenía como objetivo sensibilizar a los jóvenes sobre temas de género y derechos humanos y mejorar la posición de las mujeres en la sociedad europea. Quisimos preparar a los jóvenes para iniciar una conversación sobre la igualdad de género en sus sociedades durante y después del proyecto.
Objetivos:
El objetivo del proyecto fue dotar a los participantes del conocimiento y los recursos necesarios para:
- obtener una comprensión clara de los problemas de disparidad de género y la habilidad de implementar un cambio educativo sobre este tema;
- conocer los problemas de igualdad de género desde una perspectiva contemporánea y examinar la situación en diferentes países europeos;
- aumentar su conocimiento y experiencia en educación de género y obtener ideas sobre cómo introducirlos en la enseñanza;
- estar al tanto del acoso basado en el género, la exclusión de género y la discriminación;
- ser capaces de convertirse en voluntarios activos y ciudadanos de la sociedad;
- estar al tanto de todas las oportunidades Erasmus+.
La actividad principal de nuestro proyecto fue el intercambio juvenil que se llevó a cabo en Aarhus, Dinamarca. Los participantes del intercambio fueron representantes de 6 organizaciones asociadas de Dinamarca, Suecia, Macedonia, Rumania, Turquía y España. Cada grupo tuvo 5 participantes y un líder, un total de 35 personas.